Cocaína rosa: Esta es la droga que terminó con la vida de Liam Payne

La muerte del artista y exmiembro de la boy band, One Direction, Liam Payne en Buenos Aires, Argentina, conmocionó al mundo y a los fanáticos de la agrupación, especialmente después de que se diera a conocer que su cuerpo tenía un ‘coctel de drogas’ muy peligroso conocido como ‘cocaína rosa’.

Hasta ahora, las pruebas toxicológicas de la autopsia al intérprete indican que Liam Payne estuvo bajo los efectos de drogas antes de morir, y estos identificaron una mezcla de ketamina (anestésico) y MMDA (éxtasis) en proporciones variables y se les agrega un tinte rosa.

Las fuentes del medio ABC News dicen que en su habitación de hotel, encontraron un tubo de aluminio fabricado para ingerir estas drogas, y antes los responsables del hotel llamaron a las autoridades para pedirles que ‘enviaran a alguien urgentemente’ porque un cliente estaba drogado y alcoholizado.

“Necesitamos a alguien urgentemente porque no sé si la vida del cliente corre peligro porque está en una habitación con balcón y tenemos miedo de que pueda hacer algo que ponga en peligro su vida”.

LEE MÁS: Cuerpo de Liam Payne, repatriado en dos semanas

¿Qué es la cocaína rosa encontrada en el cuerpo de Liam Payne?

La cocaína rosa igual conocida como ‘tusi’ o ‘tucibi’ no es una cocaína, sino una droga sintética recreativa que ha obtenido mucha popularidad en fiestas y entornos urbanos en varias partes del mundo.

El nombre ‘tucibi’ viene de la pronunciación en inglés “2C-B’ compuesto químico que es el ingrediente principal de la droga, pero la que circula ahora en las calles no es 2C-B puro, sino una mezcla de sustancias como ketamina, éxtasis, anfetaminas y cocaína, lo que la hace peligrosa.

Esta normalmente se presenta en forma de polvo color rosa o anaranjado, pero el color puede variar según los químicos añadidos y su consumo causa efectos alucinógenos y estimulantes parecidos a los de las anfetaminas o el LSD, lo que causa euforia, alteraciones sensoriales y una mayor sensibilidad emocional.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *