El secretario de Gobierno de Hidalgo, Guillermo Olivares Reyna, calificó como “desafortunadas” las declaraciones del senador Cuauhtémoc Ochoa Fernández, quien lo acusó de amenazar a alcaldes para impedirles realizar gestiones.

En entrevista, Olivares Reyna negó categóricamente dichas acusaciones y aseguró que su relación con los presidentes municipales y ciudadanos se basa en una comunicación “fraterna, de colaboración y solidaria”.

Destacó que, en esta temporada de fin de año, su llamado ha sido a la paz y al trabajo conjunto por el bienestar de Hidalgo.

“De ninguna manera hay alguna amenaza. Lo único que promovemos es la unidad y el esfuerzo conjunto para sacar adelante al estado. Hidalgo está en un momento de paz, armonía y desarrollo pleno”, subrayó.

Olivares Reyna descartó que las palabras de Ochoa Fernández representen un “golpeteo político” y afirmó que el gobierno estatal mantiene “brazos abiertos” para el diálogo con todos los sectores.

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También expresó estar dispuesto a reunirse con el senador, afirmando que no existen ciudadanos de “primera, segunda o tercera” en Hidalgo.

El origen del conflicto

Las declaraciones del senador Cuauhtémoc Ochoa surgieron en una entrevista con el medio Conectados IM, donde señaló que Olivares Reyna supuestamente utiliza su puesto para intimidar a los alcaldes y evitar que se acerquen a la Comisión de Hacienda y Crédito Público del Senado, la cual él preside.

“Una cosa es que seamos del mismo partido y otra que no seamos críticos”, declaró Ochoa Fernández, advirtiendo además que desde el Congreso podrían solicitar a la Auditoría Superior de la Federación (ASF) una revisión del presupuesto de la Secretaría de Gobierno.

A pesar de la polémica, Olivares Reyna reiteró que no percibe un ambiente de confrontación, asegurando que su enfoque sigue siendo el trabajo coordinado para el progreso del estado. “Hidalgo está sumado al llamado del gobernador para trabajar en unidad”, concluyó.

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