Parque Ecológico y de Reciclaje ¿Sueño o una nueva pesadilla?

What To Know

También se busca el cierre progresivo de 450 tiraderos a cielo abierto en el estado, lo cual disminuiría la contaminación del suelo, agua y aire, por los residuos mal gestionados (lixiviados, gases de efecto invernadero y cuerpos de agua contaminados.
De acuerdo a lo informado por el gobierno, el sitio donde se plantea la construcción del parque es el mismo predio donde se planeaba la construcción de la Refinería Bicentenario.
Según refiere el gobierno, el proyecto se contempla en esta zona debido a la deuda histórica con sus pobladores, quienes por años han soportado la carga de la contaminación al ser destino de las aguas residuales de una parte del Valle del México.

La propuesta: Un centro integral de transformación

El Parque Ecológico y de Reciclaje en Hidalgo (PERH) es un ambicioso proyecto planteado por el gobierno federal y estatal. Se trata de la construcción e instalación de un centro integral de gestión y valoración de residuos sólidos urbanos.

No solo se trata de tirar basura: se busca tratar residuos reciclables como plástico, llantas, cascajo, cartón, papel y grasas. Además, mediante procesos de compostaje se transformarán los residuos orgánicos para producir biogás y electricidad. Contará con un parque ecológico, con juegos, áreas verdes y cuerpos de agua. De esta forma, se combina infraestructura de reciclaje y valorización de residuos, con la recuperación ambiental del territorio, promoviendo la economía circular.

Suscríbete a nuestro canal de WhatsApp y entérate de todas las noticias al instante

¿Qué se busca lograr?

Entre los objetivos del proyecto se encuentra la paulatina remediación y saneamiento de la región (presa Endhó, río Tula y Salado y sus alrededores). También se busca el cierre progresivo de 450 tiraderos a cielo abierto en el estado, lo cual disminuiría la contaminación del suelo, agua y aire, por los residuos mal gestionados (lixiviados, gases de efecto invernadero y cuerpos de agua contaminados.) Finalmente, pretende activar la economía local mediante la generación de empleos y la obtención de materia prima reciclada para la industria.

Ubicación con controversia

El parque estará ubicado en un terreno de 36,000 hectáreas, entre los municipios de Atitalaquia, Tula de Allende y Tlaxcoapan. De acuerdo a lo informado por el gobierno, el sitio donde se plantea la construcción del parque es el mismo predio donde se planeaba la construcción de la Refinería Bicentenario. Su ubicación es estratégica por su cercanía con el Arco Norte y con las vías del tren AIFA – Pachuca y AIFA – Querétaro, lo que facilitaría la logística.

SIGUE LEYENDO: Contaminación en Pachuca: el costo ecológico de las obras simultáneas

Según refiere el gobierno, el proyecto se contempla en esta zona debido a la deuda histórica con sus pobladores, quienes por años han soportado la carga de la contaminación al ser destino de las aguas residuales de una parte del Valle del México. Con este parque —el primero de su tipo en el país—se busca remediar y restaurar una de las zonas más contaminadas del mundo.

Y ¿qué dice la gente?

El día de ayer, se llevó a cabo una conferencia con representantes de los tres niveles de gobierno. En ella se explicó a grandes rasgos el proyecto, el cual pretende iniciar en enero de 2026. Como primer paso, se anunció la realización de una consulta pública en los municipios involucrados, para el próximo 14 de diciembre.

Sin embargo, persisten dudas y preocupaciones. Comunidades, ejidatarios y regidores han expresado su rechazo, pues temen que el proyecto se convierta en otro basurero más, que incremente la contaminación, el tráfico y los problemas de salud. También manifestaron preocupación de que el parque termine funcionando como un centro de transferencia de residuos, incluso provenientes de otros estados. Asimismo, señalan que el tiempo para realizar la consulta es muy corto y que aún hay mucha población sin información suficiente.

Mi humilde opinión

En teoría, suena excelente la idea de construir, instalar y operar un parque de este tipo justo en una de las zonas donde más se necesita. No solo disminuiría la contaminación generada por la mala gestión de los residuos, sino que contempla la restauración de los ríos Tula y Salado y la presa Endhó. Sería un sueño hecho realidad y un reflejo de la cultura que nos hace falta sobre el manejo de nuestros residuos.

TE PUEDE INTERESAR: El microbioma humano: un cosmos de vida interior

Sin embargo, existen algunas incógnitas que deben resolverse para generar confianza en la población. Por ejemplo, me gustaría saber ¿Cuál será la capacidad de tratamiento al día (toneladas/día)? ¿Qué tecnologías usarán para la valorización de los residuos? ¿Existen ya estudios técnicos como la Manifestación Impacto Ambiental? ¿Se cuenta con programas de manejo de olores, emisiones y drenaje para la construcción y operación del parque?, ¿Cómo se garantizará que solo serán tratados residuos del estado?

No queda más que seguir de cerca el avance de esta propuesta, vigilar que se consulte adecuadamente a la población y que se respeten los acuerdos y compromisos. Debemos exigir que los documentos técnicos sean públicos, deseando que sea exitoso y replicable, por el bien del planeta y el nuestro.