El Cerro de las Navajas, ubicado en Epazoyucan, a solo 30 minutos de Pachuca, es un destino imperdible para los amantes de la naturaleza y la aventura.

Este prominente cerro se eleva a unos 3,300 metros sobre el nivel del mar, superando incluso a Real del Monte que se encuentra a 2,800 metros.

Desde su mirador, se puede contemplar una vista espectacular de la zona arbolada que abarca desde Real del Monte hasta Huasca y Tulancingo, ofreciendo un paisaje que cautiva a todos los visitantes.

Para llegar al Cerro de las Navajas, tienes la opción de ir en automóvil propio o utilizar transporte público, aunque este último implica caminar un trecho considerable.

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Una vez en el lugar, además de disfrutar del mirador, puedes explorar las minas de piedra pómez y de obsidiana.

La comunidad local se distingue por su artesanía elaborada con este vidrio negro o dorado de origen volcánico, que se vende en varios locales al mayoreo y menudeo.

Foto: Carlos Sevilla

El acceso al cerro y a las minas tiene un costo de entrada de 30 pesos por persona, que se paga en la caseta correspondiente.

El camino hacia arriba puede realizarse tanto caminando como en automóvil a través de una ruta de terracería de aproximadamente dos kilómetros.

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Es aconsejable llevar ropa abrigadora, ya que la zona es boscosa y la altura hace que el aire se sienta fresco.

El Cerro de las Navajas es muy popular entre ciclistas y corredores debido a las condiciones naturales que ofrece para la práctica de estas actividades.

Al concluir tu visita, puedes relajarte en la zona de convivencia familiar que cuenta con comederos de madera y asadores.

Foto: Carlos Sevilla

Es importante llevar tus alimentos ya que no hay negocios en la zona, a excepción de la venta de dulces y bebidas.

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Igualmente cuenta con sanitarios debidamente establecidos, los cuales cuentan con agua.

En resumen, el Cerro de las Navajas en Epazoyucan combina paisajes impresionantes, actividades al aire libre y la oportunidad de conocer la artesanía local, convirtiéndolo en un destino ideal para disfrutar en familia o con amigos y experimentar la magia de la naturaleza en su máximo esplendor.

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