La caída de una de las figuras más influyentes de la música está en marcha: Sean ‘Diddy’ Combs, de 55 años, enfrenta un juicio federal por tráfico sexual y crimen organizado.
Las acusaciones se basan, en gran parte, en el crudo testimonio de su expareja, la cantante Cassie Ventura, quien lo señala como el centro de una red de violencia, abuso y coerción sexual sostenida durante más de una década.
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Desde su arresto en septiembre de 2024, Combs permanece recluido en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn. Si es declarado culpable, podría enfrentar hasta cadena perpetua.
La fiscalía sostiene que el artista construyó un “imperio de explotación sexual”, utilizando su fama para coaccionar a mujeres a participar en orgías abusivas, grabarlas y controlarlas mediante chantaje, drogas y amenazas.
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La testigo clave: Cassie Ventura
En el estrado, Cassie Ventura, cantante y pareja intermitente de Combs entre 2007 y 2018, ofreció un relato devastador. Describió violaciones, golpizas y encuentros sexuales degradantes, que ella no consintió libremente.
“Ya no puedo cargar con esto más”, declaró entre lágrimas, explicando por qué decidió testificar, a pesar de haber llegado a un acuerdo civil de 20 millones de dólares en 2023.
Ventura denunció que fue forzada a participar en los llamados “freak-offs”, orgías organizadas por Combs en las que se contrataban hombres para tener sexo con ella mientras él observaba y daba instrucciones.
Según relató, algunas sesiones duraban días, la dejaban con moretones, deshidratación y un severo trauma emocional. Dijo que llegó a desarrollar una adicción a los opioides y que, en 2023, sufrió una crisis que la llevó a buscar ayuda terapéutica.
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Violencia documentada y testigos clave
El juicio comenzó con la presentación de un video de seguridad de 2016, en el que se ve a Combs pateando y arrastrando a Cassie por un pasillo de hotel.
Testigos como Israel Florez, guardia del lugar, relataron haber recibido ofertas de soborno por parte del artista para que no informaran sobre lo sucedido.

Otro testigo, Daniel Phillip, stripper profesional, testificó que Combs le pagó para tener sexo con Cassie, y que fue testigo de episodios violentos, como ver a Combs arrastrándola del cabello mientras ella gritaba.
La defensa: “Sexo consensuado”
Los abogados de Combs insisten en que se trata de relaciones entre adultos consensuadas, y que los mensajes sexuales enviados por Ventura lo demuestran.
Durante el contrainterrogatorio, se leyeron fragmentos donde ella expresaba entusiasmo por los “freak-offs”. Ventura respondió que esos mensajes no reflejan el contexto de coerción en que fueron escritos, y que su intención era evitar reacciones violentas de Combs.
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¿Un patrón de abuso?
Desde 2023, decenas de mujeres y hombres han presentado denuncias civiles contra Combs, alegando haber sido drogados y abusados sexualmente en eventos organizados por él.
Aunque muchas de esas acusaciones no forman parte del juicio penal, la fiscalía ha optado por enfocarse en los casos con evidencia física o testigos presenciales.
El proceso judicial, que podría extenderse por semanas o incluso meses, continúa mientras se espera el testimonio de otras presuntas víctimas.
Para muchos, este juicio evalúa la culpabilidad de un individuo, y pone en tela de juicio la cultura de impunidad en la élite del entretenimiento.
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