En un giro inesperado, el boxeador Misael “Chino” Rodríguez se negó a subir al ring para enfrentarse a Omar Chávez, hijo de la leyenda Julio César Chávez, en la Plaza de Toros Vicente Segura de Pachuca, Hidalgo.
La pelea, programada para la noche del sábado, fue cancelada repentinamente, desatando la indignación del público que se manifestó con abucheos y protestas.
El viernes, ambos pugilistas cumplieron con la ceremonia de pesaje, marcando 76.5 kg en la categoría de los supermedianos.
Sin embargo, tras la ceremonia, Omar Chávez subió hasta 84 kg, lo que provocó que Rodríguez y su equipo decidieran no participar, argumentando que no querían arriesgarse ante la diferencia de peso, lo cual podría significar un golpe más fuerte de su rival.
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Ante el desconcierto, Omar Chávez tomó el micrófono para disculparse con el público, asegurando que “El Chino Rodríguez me tuvo miedo“.
Incluso su padre, Julio César Chávez, expresó su decepción, calificando la decisión como una falta de respeto, y advirtiendo que ningún promotor debería volver a contratar a Rodríguez.
La promotora Zanfer Boxing también lamentó lo ocurrido, aclarando que en 30 años de experiencia “nunca había pasado algo así“.
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