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Desde hace más de una década, el sur de Pachuca ha sido la zona que ha mostrado mayor crecimiento dentro del área metropolitana de la capital del estado, lo que representa un reto para las autoridades, que tienen que dotar de servicios a una población cada vez mayor.

Zempoala, en su zona limítrofe con Pachuca, es donde se ve una mayor expansión de la mancha urbana. Según Data México, en 2020 la población de Zempoala llegó a 57 mil 906 habitantes, cifra que, en comparación con 2010, refleja un crecimiento de 47.9 por ciento.

El fenómeno puede apreciarse físicamente en la expansión de la mancha urbana de colonias y fraccionamientos que rodean a la plaza Explanada, lugar que se encuentra en el límite de ambos municipios.

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En ese punto de la capital del estado se encuentran fraccionamientos donde viven miles de habitantes y entre los más populosos están Real de Toledo, Santa Matilde, Real de Navarra, San Alfonso y Viñedos. Por cierto, este último, sigue en franca expansión, y cada día se construyen más secciones que van cubriendo los vastos terrenos entre Palma Gorda y la localidad de Téllez.

La expansión urbana implica no sólo la construcción de casas y centros comerciales, sino que representa un desafío para las autoridades, que tienen que dotar de servicios. El problema es que muchas constructoras no han llevado a cabo la entrega de los fraccionamientos para la municipalización de los servicios.

Esa situación genera que los inquilinos costeen servicios como el alumbrado, el mantenimiento de áreas comunes, la seguridad de las zonas habitacionales e incluso acciones de mantenimiento al alcantarillado.

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En estos días de lluvia ha surgido otro problema, que se ha vuelto como las enfermedades estacionales: aparece cada año y se vuelve un dolor de cabeza. Se trata de los baches, que surgen como hongos cada que llueve.

Producto de una defectuosa construcción de vialidades, las oquedades en calles y avenidas son ya un problema recurrente que al parecer no tiene remedio, por la cuantiosa inversión que se requiere (10 mil millones de pesos, según cálculo del alcalde de Pachuca, Sergio Baños).  

El mal estado de las calles y la privatización de los servicios no es el único problema, también el transporte público, que se ve rebasado ante la demanda. Este lunes 29 de julio vecinos de San Pedro Tlaquilpan cerraron durante una media hora la carretera México-Pachuca, a la altura del distribuidor vial de Téllez, precisamente para exigir más unidades ante la saturación del servicio.

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Se quejan de que deben esperar horas para lograr viajar como sardinas enlatadas, a bordo de combis destartaladas cuyos modelos dejaron de construirse hace décadas, con lo que arriesgan su propia vida.

El dilema está en que el sur de Pachuca y otras zonas de la capital del estado requieren de un plan de acción que necesita de recursos que los gobiernos municipales no tienen. Y tampoco se ve que el gobierno estatal quiera entrar al rescate de manera integral, sino que seguirá administrando solo algunos mejoralitos.

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